¿Todavía no te has dado cuenta del impacto de los nutrientes en las funciones de tu cuerpo?
El concepto nutrición funcional pretende integrar al organismo como un todo. «Con la finalidad de lograr en la persona una vitalidad positiva» Paola Hernández.
Es una ciencia integrativa basada en evidencia científica que pretende enseñar cómo cada uno de los nutrientes que no vemos, pero que están escondidos en los alimentos, tiene una misión en tu salud.
Tenemos la capacidad y la responsabilidad de cambiar el transcurso de nuestra salud.
«La genética es el arma, pero el ambiente es el gatillo´´
Es decir, que más allá de los genes, la manera en que comemos, descansamos, nos movemos y manejamos el estrés va a determinar si esos genes se van a manifestar o no, podemos prevenir enfermedades y modificar su transcurso.
Algunos consejos para que no te vayas de aquí con las manos vacías y puedas poner cositas en práctica:
La alimentación debe basarse en alimentos, es tan obvio que parece una locura escribir esto, pero nos encontramos ante una sociedad tan industrializada que no comemos alimentos, si no productos.
Fabricados a base de aditivos, azúcar, glutamato, conservantes, harinas refinadas, grasas hidrogenadas y un largo etcétera de ingredientes que tienen el fin de: que quieras más.
Por lo tanto tu alimentación debe ser lo más natural y orgánica posible, verduras, frutas, tubérculos, huevos, pescado y carne. Todo aquello que podrías comer sin que exista un supermercado que te lo proporcione.
Respeta tu ritmo circadiano, muévete con el sol, descansa lo suficiente, el modo búho no debe formar parte de tu estilo de vida, si te has acostumbrado a este ritmo, hay que cambiarlo. Controla el consumo de cafeína, busca alimentos que estimulen el triptófano y la melatonina y evita la exposición a pantallas y luz por la noche.
Realiza ayunos, que no son más que descansos digestivos. Sobretodo por la noche, entre la cena y el desayuno deberían pasar al menos 12h para que nuestro cuerpo pare, descanse y se reponga de forma correcta.
Movimiento a diario, gestión emocional, baja revoluciones y contacto con la naturaleza. Las cosas más básicas son las que más nos cuestan, nos empeñamos en el suplemento perfecto, que sí, son necesarias muchas veces, pero sin las bases y las cosas simples cubiertas son humo.
Reposición de nutrientes. Según tus características, tu estado de salud y tu objetivo tendrás unos requerimientos nutricionales diferentes, por lo tanto busca una nutrición personalizada, adaptada a tí.
Hay nutrientes esenciales, eso significa que tu cuerpo no puede obtenerlos de ningún lugar a no ser que tú se los des.
Un ejemplo fácil: El omega 3, en concreto el ácido docosahexaenoico (DHA), son ácidos grasos poliinsaturados esenciales, para llegar a una dosis correcta habría que consumo mínimo 3 raciones de pescado a la semana, si esto no ocurre en tu caso, necesitas suplementación. Es solo un ejemplo, pero como ya te imaginarás hay muchos, muchísimos micronutrientes y componentes bioactivos en los alimentos que necesitas.
Alimentarse es una necesidad, pero alimentarse bien es un arte.